¿QUIÉN MATÓ A JUANITA NADIE?

Recorrió a grandes zancadas el patio mientras la monja trotaba a sus espaldas, ordenándole que parase. Nunca se había sentido tan insultada. Ella misma había datado las piezas, no pensaba devolverles ni un puñetero céntimo a esas mojigatas.

Al entrar en la cocina se quedó petrificada. Una punzada de dolor atravesó su pecho, sintiéndose traicionada por aquella a quien quería como a una hija.

-          - ¿Qué haces aquí?  – consiguió preguntar al fin.

-         -  Necesitaba el dinero – fue lo único que respondió, soltando la estatuilla falsa sobre la mesa.

-         -  Te lo hubiese dado…

-          - Sabes que eso no es cierto – Sor María irrumpió en la estancia y se colocó junto a la ninja    fantasma. Cogió la estatuilla y la contempló; era una copia casi perfecta a aquella que reposaba en  su cocina – una copia aún más valiosa que la original, una por la que podría demandar un precio  exorbitado por fraude.

-        -  Contactaré a mi abogado – informó Juanita dándose media vuelta. – Nos veremos en los tribunales.

-         - No, no nos veremos.

Algo punzante golpeó su cabeza y todo se volvió negro.

Y ahora viene esa explicación de cómo lo hemos averiguado que todos esperamos. Ante todo, recordad tenerme paciencia y no os enfadéis con mi lógica.

La oruguita amarilla o bicho feísimo (dependiendo de la persona) representa la monja. Simplemente porque me recordaba – cara blanca y cuerpo negro; y dando un poco de inquietud también (¿no? ¿Solo a mí?)

El tarro con bichejos y las manzanas representa la cocina y la tercera imagen con gárgolas representa a la estatua.

Si Ali, me temo que tenías razón en todo. En serio, una cosa es elegir la misma ropa, ¿pero… deberíamos preocuparnos? ¿Qué estoy pensando ahora?

Si has pensado en gatitos, sal de mi cabeza ><

Ahora bien, si habíais pensado algo totalmente diferente no os sintáis mal, lo hice para que pudiese haber un poco de confusión.

La exploradora podría dedicarse a recorrer lugares extraños con oruguitas en ellos, las gárgolas podrían estar relacionadas con el pez colgado en el salón y el tenedor con las manzanas de la primera imagen (¿Qué? ¿Vosotros no coméis manzanas con tenedor? Se me acaba de caer el monóculo del shock)

En fin, siento haberos dejado en la incertidumbre – lugar nada bonito donde encontrarse - tantos días. En el trabajo me pusieron muchos días sin ninguno de descanso y después del quinto me convertí en un huevo frito.

A disfrutar del “Juebado”! 😊