Creo
que no sorprendo a nadie si comento que escribir siempre ha sido mi sueño.
La
primera vez que me puse a ello no debía tener más de doce años y por supuesto
era una historia horrible en la que dos hermanas intercambiaban su cuerpo.
A
parte de todos los fallos en la historia, mi principal problema es que me
encantaba detallar las cosas (creo que porque pensaba que así sería más creíble)
y terminaba con enumeraciones absurdas que no interesaban a nadie. “La chica abrió su armario; tenía 5
pantalones, 10 camisetas ajustadas, 4 jerséis, dos chaquetas…” Os hacéis
una idea.
También
estaba obsesionada con saberlo TODO de los personajes. Como si saber que su
horóscopo era ascendente júpiter fuese relevante. “Claro, eso explica que tenga 10 camisetas
ajustadas. Ahora tiene sentido” Dijo nadie nunca.
Luego
me dio por intentar escribir una novela musical. Y no, no quiero decir un guion
para una obra musical. Simplemente cada cierto tiempo le metía la letra de una
canción que pegaba con lo que sentían los personajes. Y si quien lo leyese no
la conocía, tough. Creo que hubiese
sido la primera (y última, seguro) en su género.
Una
vez que comenzó mi época “guotica” (oscurilla wanna be) mis escritos también se
volvieron oscuros. Como mi alma. O eso hubiera dicho por aquel entonces.
La
mayoría de los relatos tenían rasgos comunes, como gente que suspira, chicas
que contemplan tras ventanas, gente que se vuelve loca y en general mucho
drama.
Pero
claro, por aquel entonces salía con el Lord
of melancholy (Señor de la melancolía o Lordito para los amigos) y yo misma
me auto llamaba Lolita satánica (si,
yo tampoco tengo palabras) así que como veréis no se me podía pedir mucho más.
Años
después, una vez superada un poco mi obsesión enfermiza con lo dramático y
mientras estudiaba un curso de literatura infantil en Malmo (con O
sorprendida), nos mandaron escribir un cuento ilustrado para niños.
Mi
historia se titulaba Ania’s misgivings
(Algo así como “Las dudas de Ania”) e
iba sobre una niña zombi que se sentía fuera de lugar. Imagino lo que estaréis
pensando, ¿seguro que niños y zombis es
la mejor combinación? Ya he dicho que solo lo supere un poco
Puede
que la historia no fuera gran cosa, pero la verdad es que disfrute bastante con
las ilustraciones, y es una de mis pocas creaciones de las que aún me siento
orgullosa.
Además,
este curso me dio la oportunidad de conocer otras historias que aún recuerdo,
como la de mi compañera. No recuerdo su título real, pero a mí me gusta
llamarla “And… nothing happens”
El
primer borrador consistía en: Chica y su hermano van de vacaciones al pueblo
con sus abuelos. Se lo pasan bien.
Tras
leerlo y cuando me preguntó que me parecía intenté explicarle con el mayor
tacto posible que en el cuento tenía que haber cierta estructura (Introducción,
nudo y desenlace) y lo suyo no llegaba ni a introducción
He
de decir que me escuchó y cambió la historia, que quedó en la siguiente: bla
bla, se lo están pasando bien. Cumpleaños de su hermano. Van a por una tarta.
Se les olvida en el autobús. Os tengo en
vilo, ¿verdad? ¿Queréis saber que pasa? ¡Pues que compran otra tarta! Ya…
Es
cierto que estábamos de Erasmus y que trabajar duro no estaba en la mente de
nadie, pero…come on. Ante la duda
mete dragones. Siempre.
Ya
de vuelta en España me apunté con mi hermana a un curso de escritura creativa.
Cada semana el profesor nos daba tres palabras aleatorias y con ellas teníamos
que crear una pequeña historia.
De
ahí salieron joyas como “Pan para
celíacos” – señora que va a la panadería y se enfada con el panadero porque
no tiene pan sin gluten para su marido.
…” Pero sus gritos quedaron ahogados por
el graznido enfurecido del dragón que mientras se abalanzaba sobre ellos…” Hacedme caso, dragones.
He
pensado que sería curioso intentar hacer algo parecido. Así que voy a daros
tres palabras y os voy a retar a intentar escribir algo a partir de ahí. No
tiene porque ser un cuento propiamente dicho, puede ser un microrrelato, un
verso sin rima o una frase larga y sin sentido. Lo que os apetezca.
Y
las palabras ganadoras son: Neptuno,
radio y grito.
Y
como lo justo es justo, si queréis podéis sugerir palabras vosotros también e
intentaré escribir algo para la semana próxima 😊
Espero
no haberme excedido mucho hoy, claramente el título no ha hecho honor al texto.
Es que para mí es domingo ^^u
Gracias
por leerme!
"Entre Tritón y Proteo, sobre Neptuno silenciosa, una cápsula inerte orbita. La radio emite, entre gritos de pánico, una voz serena por baliza:
ReplyDelete- Todo va bien, el fallo es pasajero, sobreviviremos"
Un poco más micro que relato, pero cuenta el intento no? :P
Yo aún tengo en perfectas condiciones mi primera (y sospecho que última) edición de "Ania's Misgivings"!
http://i.imgur.com/gY59CWJ.jpg (Viva blogspot y su incapacidad para insertar imágenes en comentarios!)
Recuerdo aquel relato de "nothing happens", es sin duda lo peor que he escuchado a lo que alguien se atreva a llamar "relato", prefiero más una enumeración de cosas de un armario si hay que elegir.
Yo recuerdo que cuando estaba en el instituto (1º o 2º creo), mi afición era crear textos sangrientos y muy desagradables en francés y en alternativa, porque tenía a una profesora de estas escandalizables y me hacía muchísima gracia verle poner el grito en el cielo. Incluso llegó a llamar a mis padres a tutoría, pero ellos simplemente se carcajearon y le preguntaron a mi maestra si había cometido el error de mostrarse horrorizada tras el primer relato.
Entre mis grandes éxitos se encontraban las personas que explotaban sin demasiada justificación argumental y la gente que comía o terminaba llena de caca.
En fin, que ahora me extiendo yo más que un chicle viejo, disfruta tu neo-Domingo y gracias a ti por tus escritos :)
Me encanta. Creo que voy a hacer esto más a menudo y luego voy a publicar un libro con vuestros microrelatos. Trabajad para mi :) - con voz de mala que extiende las vocales, se entiende. Si no no tiene sentido.
DeleteTu profesora cometió un grave error de novata. Una vez mi profesora de religión nos pidió que hiciésemos un mural con alguna frase que nos gustase en el centro. Creo que esperaba algo así como "Jesús me quiere" o "La paz en el mundo", pero a mi me pareció más divertido escribir "El hombre es cruel por naturaleza y no hay infierno más verdadero que este mundo" xD A ella no le pareció divertido me temo.
Al parecer yo también soy un chicle mascado, que forma de divagar :p
PD: Lo lógico sería que en el siguiente post metas tú un relato con las mismas palabras que has propuesto! :)
ReplyDeletePD2: Efectivamente, Blogspot tampoco te deja editar los comentarios!
Me temo que después de las historias que estoy leyendo, el listón está demasiado alto. Aunque supongo que no son palabras tan horribles con las que trabajar. Podría ser peor. Podría ser gluten. A ver a quien --- se le ocurre algo emocionante con gluten :P
DeleteEl viajero llevaba conduciendo mucho tiempo, quizás demasiado. La sed era insoportable, se moría por una cerveza glacial. De repente vio el letrero de un bar de carretera: "Bar Neptuno". Tenía que parar, sabía que no encontraría otro en un radio de varios kilómetros, quizás demasiados. Entró en el local y se dirigió al aburrido camarero: "Por favor, una Cruzcampo". "Lo siento, sólo tenemos Estrella Galicia" le respondió el impasible camarero. De la garganta del viajero escapó un grito desgarrador: "¡¡¡Nooooooo!!!
ReplyDeleteYa ves que uno tira para casa :) Besotes.
Jajajaja!!! Domingo, es el mejor relato que se podría escribir. Nada de lo que se escriba estará a la altura
DeleteNo puedo estar más de acuerdo. Me temo que nada de lo que escriba va a igualarlo. Historia absurda y a la vez absolutamente realista y creible.
DeleteMe encanta :)
Neptuno (Cáncer, con ascendiente Aries; tenía un lunar con forma de cereza en…una parte secreta de la anatomía)y su hermano Radio fueron a visitar a su abuela al pueblo. Neptuno y Radio eran dragones, por cierto. Y Radio poseía 15 camisetas naranjas (estaba muy obsesionado con ese color, ya que su equipo de fútbol de pequeño, los Alas dragonizadas, que habían ganados 2 liguillas de barrio y competían en 3ªB, vestían el mismo) y no tenía pantalones porque, como todo el mundo sabe, los dragones odian llevarlos.
ReplyDeleteEl pueblo de la abuela, a todo esto, era un pueblo zombie. Pero eran zombies amigables, como de cuento para niños.
Pues a todo esto, Neptuno y su abuela compraron una tarta de cumpleaños para su hermano pequeño, Grito, porque era su cumpleaños. Pero se la dejaron en el autobús. Pero compraron otra. Y no pasó nada más.
Ah, sí, se lo pasaron bien.
Y el lunar estaba en el culo.
jajaja es como resumir toda mi vida de escritora wanna be en unos párrafos. Me encanta como tu también usas las palabras como quieres. Espero que te acuerdes y nombres Grito a tu primogénito. Yo estaré allí para recordártelo porque probablemente seré el padre :))
DeleteY con lunar en el culo
No tenía remedio. Gato que encontraba, gato que se traía para casa. Este era el octavo, y como no podía ser de otra manera, le había puesto Neptuno. Total, uno más. Ya la llamaban la loca de los gatos. ¿Qué importaba otra boca más para alimentar? Eso sí, que bien le vendría que le tocara la lotería. Hoy había comprado un boleto en cuanto se encontró a Neptuno. ¿No dicen que los niños vienen con un pan bajo el brazo? ¿Por qué no los gatos? Estaba escuchando la radio pendiente del sorteo. Neptuno bufaba a Marte; Venus arañaba el sofá. Si tan solo le tocara un pellizco... De pronto salió el número ganador. No se lo podía creer! Salió corriendo hacia el bolso con las manos temblándoles. Tuvo que dar un salto mortal hacia delante para no pisar a Tierra que estaba repantigada al fresquito. Ese es el número, ese es el número. Casi lo parte a la mitad al sacarlo del monedero. Y sí, era el número. Solo recuerda que gritó, luego.. todo se volvió oscuro. Unas lengüitas le despertaron horas más tarde. ¡Era rica!
ReplyDeleteJuró que no pensé cuando me puse a escribir esta mañana que fuese a encontrarme con historias tan geniales :)
DeleteDeberías escribir más relatos Vio!
Jajajaja, que dices!! Solo salen chorradas. Sin dragones, eso sí, pero chorradas. Hoy es que he dormido poco, y mis neuronas están desatadas.
DeleteMe ha encantado tu entrada de hoy y las tres palabras. De vez en cuando hacer trabajar a las células grises no está nada mal.
Un beso